lunes, 20 de enero de 2014

Facebook: ensalada de canónigos con ortigas.

Cada día estoy más convencida de que esta red social es una droga dura que me tengo que dejar.

La razón es la de siempre. Mis propias ideas molestan. Pero un pajarito me ha dicho lo siguiente, algo que me ha venido de nuevo a la mente como una poderosa luz divina...

En Internet, SIEMPRE, se hieren sensibilidades
Y es que no siempre la intención cuenta. Mejor dicho, no es suficiente para que las cosas anden en paz y armonía. A mí me irrita sobretodo la idea de que si comento en el enlace de un muro sobre X tema tengo todas las papeletas de que me malinterpreten, sobretodo porque soy de esas personas que no  suelo  posicionarme claramente a favor de algo o alguien y a menudo me tildan de cosas que no soy porque se lo imaginan. El día que lo hago se me echan encima. Y me diréis, "pasa del tema, pasa de la gente y pasa de todo", pero es que mi cabeza no concibe la idea de tratar a los demás como fantasmas, lo cual me acaba convirtiendo el muro o el de otros en una batalla campal donde todo el mundo quiere decir la ultima palabra y llevar razón.
¿Quiero acabar teniendo yo la razón?. No es por querer, o tienes razón o no la tienes. Pero más allá de tenerla o no tenerla, me cansa que la gente no sea justa. El "cómo" se dice algo es muy importante, en este mundo estamos para aprender, no somos mejores que nadie, cada persona lleva su propio proceso de crecimiento y si esa persona no tiene razón, hay que decirlo, pero sin humillarle. Porque lo he visto más de una vez en el muro de la gente, algunos/as se autoconceden el derecho a denigrar a otra persona porque se equivoca en algo, normalmente son gente que piensa que el respeto hay que ganárselo a ostias (de momento verbales). Y no todo en Facebook es malo, gracias a esta herramienta he sido testigo desde la concepción de una criatura hasta su nacimiento, algo que este año estoy volviendo a vivir con todo el amor del mundo a pesar de que no puedo estar en Valencia para tocarle la pancita, gracias a Facebook puedo estar en contacto con personas que por distancia o falta de tiempo no puedo ver a diario y organizar quedadas a través de la herramienta de eventos. Pero claro, es que las ortigas pican.

A) No hay moderadores en los muros. Tú eres el moderador y la persona encargada de borrar los comentarios. Por una parte, bien, por otra...es una ful cuando las cosas se van de madre, porque si te pones a borrar comentarios, aunque tengas razón, la gente no lo va a entender.
B) Internet no es un lugar fácil para decir lo que uno piensa, lo fácil es escribirlo y darle al ENTER, lo difícil es hacerle entender tus ideas a un grupo de personas que no te están viendo la cara, ni pueden escuchar el tono de voz.
C) Las cosas que parecen super importantes a nivel de Internet no suelen serlo  a nivel de calle, y en la calle la gente no tiene forma de sacarlas a colación.
D) Siempre hay alguien que busca la forma de sentirse atacado para contraatacar.


Conclusiones:

1) Nunca digas cosas en Facebook que no le dirías esa persona a la cara en la calle, hay que ser consecuente con tu propio yo y no "transformarse"  por la mera facilidad de teclear burradas sin que las consecuencias sean físicamente inmediatas.
2) Siempre es mejor controlarse que estallar, sólo si te arde más no decir lo que piensas por alusiones por razón de credo y/o orientación sexual, es lícito hacerlo. Porque pelearse por un cartel cansa mucho, se pasan miles al día y no puede frenarse la difusión.
3) Hablando de difusión, hay que tomar la sana costumbre de comprobar si un llamamiento de ayuda es real.  ¿Cómo?. Muy sencillo, comprobando esos datos por Google. Y confieso que yo he caído en la trampa de pasar mensajes con toda la buena intención de ayudar a alguien pero hay gente con muy mala intención de reírse precisamente de los avisos que SÍ son reales.

Tiene que estar esta muchacha hasta los genitales de ver volar su imagen por la web.
4) Por lo general, siempre es mejor no opinar en espacio público sobre política, religión o fútbol.Y de lo último, está en esta categoría porque no siendo un tema espinoso, hay gente que tildan a otros equipos de ser el mal sólo por su mera existencia. Es muy triste, porque estamos hablando de un deporte que debería ser un espacio conversacional y divertido para la gente y no lo es porque se mezcla con la política. Y eso que yo no soy futbolera.
5) Si ves mascotas exóticas que no sean de tu agrado, abstente de comentar que son inadecuadas por salubridad, porque seguramente su dueño/a las tenga más limpias y mejor cuidadas de lo que tú te empeñas con tu salud y aseo personal. Como mucho di que no te gustan, eres libre de hacerlo. A menos que veas en las fotos mierda en su jaula, literalmente. Y en ese caso, no humilles a esa persona, díselo por privado, no es plato de buen gusto tener ese tipo de fallos. Y es que es eso, sé que me repito, pero la humillación no es pedagógica.

No sé si es que este tema es tabú pero no he encontrado ni un sólo blog en español que recopilara algo parecido a todo lo que he dicho. Me parecen cosas muy básicas y quizás por eso nadie las publique, pero sin embargo, son conductas negativas que veo a diario. Hoy creo que era necesario hablar de ello. Y bueno, si alguien acaba aquí leyendo mi parrafada y le toca un poco la patatica, algo bueno habré conseguido.